Festival Charco, un puente entre España e Iberoamérica

Por Sergio Galeano. Publicado el 30 de junio de 2016

 

Sucede en ocasiones que cuando dos culturas buscan un acercamiento, hay que derribar unas cuantas barreras, aunque la afinidad esté a flor de piel. Esa es una vieja historia pero la belleza y el reto está en el camino. Y eso es lo que debieron pensar el equipo de Charco cuando emprendieron este viaje hace solo unos años. A día de hoy, Charco es prescriptora de contenido iberoamericano en el mundo a través de la comunicación, el management y la promoción artística.

Nos acercamos al festival Charco, enmarcado dentro de la programación de Noches del Botánico, que tiene como misión crear un circuito por el que puedan desfilar artistas de diferentes procedencias y dotar a la ciudad de Madrid de los sonidos que merece.

Como cuenta el organizador Miguel Ángel García Garrido: “está creciendo mucho el interés de los españoles por visitar países latinoamericanos y eso hace que se acerquen mucho las culturas.” Justamente esa es la filosofía que promueve el festival Charco, acercar la música de los artistas de Iberoamérica a nuestras fronteras y crear un puente que se sustente sobre la diversidad y la apertura de mente. Esta segunda edición cuenta con dos días de música en directo. El sábado aparecerán en escena los colombianos Bomba Estéreo, su combinación de música electrónica y ritmos tropicales pondrá a bailar hasta los más reservados. Desde la ciudad de México llegan dispuestos a quemar literalmente el escenario, Molotov, una de las bandas del rock latino más escuchadas en nuestro país, aunque no serán los únicos profetas de este género. Los españoles Toundra son expertos en crear potentes atmósferas sonoras que traspasan fronteras, dejando las partes vocales en el banquillo.

El domingo se podrá disfrutar de unas actuaciones más melódicas y reflexivas como las del uruguayo Jorge Drexler y el gallego Xoel López, ambos siempre abiertos a los sonidos que quedan al otro lado del charco. Sin embargo, otras apariciones como la de los chilenos Chico Trujillo, pondrán la guinda a la noche para aquellos que no quemaron suficientes calorías con las actuaciones del día anterior.

Para los latinoamericanos que se acerquen serán noches de nostalgia y placer auditivo, para los españoles, estarán repletas de nuevas experiencias y sensaciones. Pero, sin duda, será un gran paso para el acercamiento de dos culturas que comparten los mismos padres.