La creatividad no es sino la inteligencia que se divierte. Wes Anderson -cineasta americano, un hipster antes de que estos existieran- tiene películas divertidas, estimulantes, estrafalariamente elegantes con un toque de “grand class” pero aptas para todos los que disfruten de los espectáculos visuales.

Sus escenarios son presa de búsquedas y seguimiento en las redes y sus mecanismos de seducción están hechos de miles de apropiaciones culturales. Divertir con cultura e inteligencia es lo que pedimos a los que nos gusta disfrutar. En su última película, Isle of Dogs, Anderson se involucra con la cultura japonesa de manera casi académica, apoyado en un elenco de ilustres japoneses que van de la archiconocida Yoko OnoKen Watanabe, pasando por Yôjirô Noda, vocalista de Radwimps.

La historia es única: las montañas de basura son sombrías, lo que hace que los detalles individuales sean más notables. A través de esas enormes moles de detritus, se observan los teleféricos en el horizonte como si fueran pequeñas manchas en los hilos distantes de hipnóticos movimientos.

Y ahí están los perros, que nos miran directamente con sus ojos de perlas negros o se miran unos a otros. Su expresiva claridad de movimiento es muy divertida. El perro protagonista de la historia Cranston’s Chief es la estrella de la película, un extraviado e inconformista, un rudo que es el tema de de la trama y la resolución. Y hablan por boca de Tilda Swinton, Bill Murray, Jeff Gofdlun, los Coppola, etc.

El jefe-perro reflexiona sobre la inevitabilidad del destino de las especies: una vez mordió la mano de un humano, una mano que literalmente intentaba alimentarlo pero sucedió algo extraño por conmovedor en la carga de la autocrítica moral del jefe. No se lo perdonó, al contrario de lo que hacemos los humanos.

Ambientada en un Japón del futuro, es otro ejercicio completamente distintivo y formalmente brillante en la inocencia sabia de Anderson, que se aposenta entre la ingenuidad y la sofisticación inspirada.

Son perros exiliados que nos muestran como tratamos a los que vienen y son diferentes. Un cuento moral. Su director hizo una premier para amos con perros y fue todo un éxito.

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