Los olvidados del rock del Cono Sur
En los inicios del rock en el Cono Sur hubo artistas que la historia oficial dejó relegados. Te contamos quienes son.
Si en las guerras la historia la escriben los que ganan, en la música ocurre algo similar. La bibliografía por lo general sólo enumera a los artistas que han tenido repercusión masiva. Pero ¿quiénes son esos otros héroes anónimos que también formaron parte del comienzo del rock cantado en español en el Cono Sur? Veamos.
Desde mediados de los años 50 comenzaron los intentos por cantar rock en el idioma de Cervantes. Pero lo cierto es que en esos comienzos, se trató más que nada de adaptaciones de clásicos del rock estadounidense y anglosajón. O en algunos casos cuando los grupos se aventuraron a realizar composiciones propias, igualmente mantuvieron el idioma inglés.
Los argentinos fueron pioneros en eso de cantar rock en castellano. En 1956 el Rock con Leche, compuesto por Délfor Dicásolo, Santos Lipesker y Aldo Cammarota, para el programa radial La Revista Dislocada, dio el puntapié inicial. Al año siguiente se estrenó Venga a Bailar el Rock, tema central de la película del mismo nombre e interpretada por The Big Rockers.
Claro que en ese entonces los primeros esbozos eran aún temas aislados como Rock del Tom Tom (Johnny Tedesco, 1961) y Mi Pancha (Los Dukes, 1963). El Mundial de Fútbol de Chile disputado en 1962 aportó un grano de arena con el Rock del Mundial, el primer rock original de ese país, interpretado por Los Ramblers. Aunque el rock chileno como tal tardaría muchos años en llegar, pues en esa época tenía su apogeo la nueva ola chilena con cantantes que interpretaban desde rock and roll hasta boleros y canzonettas italianas.
Recién en 1965 en Argentina comienzan a editarse por primera vez discos en formato LP con canciones originales. Pero el límite entre el rock y el beat todavía era muy difuso e incluso se usaban ambas palabras como sinónimos. Los debuts homónimos de Los Gatos Salvajes, el primero con mayoría de composiciones originales en español, y Sandro y Los del Fuego son prueba de ello. Pero al año siguiente se dará un hito muy importante con la edición del simple Rebelde/No finjas Más, de Los Beatniks, dos composiciones con letras que serían la semilla de la originalidad que marcaría al rock argentino de allí en adelante y por lo cual sería reconocido en el mundo entero. Un tercer single, Soldado, fue grabado pero no fue lanzado por miedo a la censura. Mientras, en Chile, Los Mac’s y Los Picapiedras incluyen por primera vez un tema propio en un álbum: No te Comprendo y Presentimiento respectivamente.
Mientras tanto en Uruguay durante los años 60 ya venían tocando Los Mockers y Los Shakers, dos agrupaciones fundamentales en la zona del Río de la Plata pero que aún cantaban en inglés. Por eso la llegada de El Kinto, en 1967, liderado por Eduardo Mateo y Rubén Rada, sería la punta de lanza del rock en español en la banda oriental. Este grupo logró grabar composiciones propias, con muchos elementos del candombe y la bossa nova, más cerca de Santana que de Los Beatles. Dichas composiciones recién verían la luz en un álbum editado a fines de los años 70.
1967 también sería el año que marcaría la llegada del rock original a Bolivia cuando Los Red Socks graban su segunda producción e incluyen dos composiciones propias: Chica Ye Yé y Chauka 67. En Chile, Los Picapiedras lanzan Malon A Go-Go que combina instrumentales surfers con temas cantados. En Argentina, El Grupo de Gastón registra Oasis, un tema con Claudio Gabis como guitarrista invitado, y en el interior del país aparecen grupos como los entrerrianos Los Grillos que editan un simple a través del sello Microfón.
Para 1968, Bolivia comienza a tener una actividad mayor en el rubro y bandas como Los Dhag Dhag’s, Los Loving Dark’s y Los Grillos editan EPs y discos con composiciones propias. Ese también es el año en el que los uruguayos Kano y los Bulldogs graban Soledad, su primer simple en español, luego de dos discos en inglés. En Paraguay, Los Rebeldes, apadrinados por Litto Nebbia, se convierten en el primer grupo paraguayo en dejar un registro fonográfico con Me Quedo en Silencio, Oye, Triste Partida y Estoy Soñando. Lo curioso es que esa placa fue grabada en Buenos Aires y habría que esperar hasta los años 80 para que rockeros paraguayos puedan grabar un disco en su país.
Al mismo tiempo, en Argentina, proliferan las ediciones de sencillos de 45 rpm o 7 pulgadas: unos primerísimos Abuelos de la Nada, comandados por Miguel Abuelo, registran temas para el sello CBS al igual que Grupo Uno, oriundos del sur del país y Los Vip’s graban su único registro con temas propios y cantados en castellano: Un lugar/Yo Sólo Quiero un Par de Monedas. El músico y poeta Daniel Irigoyen, al frente de Los Mentales también graba un simple con dos temas producidos por Litto Nebbia.
Al llegar el último año de la década, todo el camino recorrido hasta entonces parece comenzar a dar sus verdaderos frutos. Los grupos decididamente se lanzan a componer en castellano y a dar rienda suelta a su creatividad. Poco a poco comienzan a quedar atrás las letras puramente románticas típicas del beat para darle paso a una lírica y música mucho más original, que tendría su apogeo a partir de los años 70.
Así es que en 1969, los paraguayos de los Blue Caps, contratados por EMI Argentina, logran grabar su primer disco, Déjame Mirarte, con composiciones propias. En Bolivia Los Splendid, que venían de hacer solo música instrumental, graban un EP llamado Hagamos las Paces. El power trío Los Tennyson, editan un EP que incluía el tema Psicodélico, que llama la atención por su letra crítica hacia la psicodelia y sus costumbres. Los Black Stones, caracterizados por su desprolijidad y su sonido crudo lanzan un EP de cuatro temas con dos composiciones propias. En Uruguay, aparecen bandas como El Sindykato, Opus Alfa y Psiglo, pero recién llegarían al disco en los años siguientes.
En Argentina hay una ebullición cultural que se ve reflejada en la música rock y es impulsada por sellos creados con tal fin como Mandioca. La comunidad hippie de La Cofradía de la Flor Solar edita el single Sombra Fugaz por la Ciudad/La Mufa; La Barra de Chocolate, liderada por Pajarito Zaguri, ex Beatniks, lanza su único disco de larga duración; el artesano y músico Adán Quieto hace lo propio con un sencillo para el sello Trova. Extraña Dimensión, Séptima Brigada, Jarabe de Menta y Los Brujos son otros grupos que editan simples en ese fructífero año. Todo esto en paralelo a la edición de los discos de Los Gatos, Manal y Almendra aunque esa es una historia mucho más contada.
La década de los años 70 ya marcará el comienzo de otra época con el rock cantado en español haciéndose cada vez más fuerte y original. Pero ese será otro capítulo… Por ahora lee nuestras otras publicaciones sobre el tema:
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