El bombón de Venezuela
Por el año 1962, la popular cantante Sonia López junto a la Sonora Santanera de México sonaban insistentemente en las radios venezolanas, esto ayudado por la gran aceptación que tenían en el país las películas mexicanas. En algunas de ellas se dejaban escuchar números musicales de la conocida artista y rápidamente se convertían en los éxitos del momento.
Aquel éxito no podía pasar desapercibido y en los carnavales de 1963, la singular artista se presentó en Caracas junto a la Sonora Santanera. La exquisita voz de Sonia López junto a su belleza física eran un espectáculo especial. Todo esto de alguna manera llamó la atención de algún empresario del disco en Venezuela, que decidió hacer algo similar con una actriz y cantante maracucha que también vivía uno de sus mejores momentos artísticos: Lila Morillo. Lila realmente era un bombón y apostaron a su belleza física y a su refinada voz para emular el éxito de la López. Pero quizás la poca promoción por parte de un efímero sello disquero (Discoro en Venezuela, B.B.M. en Estados Unidos), unido a la poca originalidad lograron que este proyecto fuera inadvertido. (José "Cheo" Guevara)