Colección de oro Vol. 1
LUCHO BARRIOS, DOLOR Y SENTIMIENTO EN EL BOLERO (SEMBLANZA)
Lucho Barrios es referencia indispensable al momento de hablar sobre el bolero en el Perú y su trascender en países como Chile y Ecuador. Su potente voz y estilo de canto desgarrado, acompañado de una particular intensidad interpretativa, lo hace merecedor a un gran éxito y popularidad llegando a ser considerado el Rey del Bolero Cantinero; estilo de interpretación del bolero de modo lastimero con letras enfocadas en el desamor y despecho.
Luis Barrios Rojas nació en la Provincia Constitucional del Callao el 22 de abril de 1935 viviendo allí hasta los nueve años aproximadamente. A esa edad se muda con su familia al populoso Barrios Altos; exactamente a la calle Penitencia 324 Jr. Paruro, ubicado en el distrito del Cercado de Lima. Durante su niñez escuchó música criolla, pasillo ecuatoriano, tango y bolero, géneros que indiscutiblemente marcaron influencia determinante en su desarrollo musical.
Alrededor de los diecisiete años decide ser cantante lírico con la ilusión de alcanzar los laureles de su ídolo primo, el tenor Luis Alva, y en ese propósito estudia durante dos años en la Escuela Nacional de Ópera. Lamentablemente, deja sus estudios debido a la inestable situación económica por la que atravesaba. Mas adelante, en 1955 incursionó en la música andina bajo el nombre artístico de El Tenor Amauta en el que Barrios interpretaba huaynos con la folclórica indumentaria del morochuco ayacuchano. Posteriormente, en ese mismo año, incursionó en la música criolla formando junto a los guitarristas Francisco “Paco” Maceda y Modesto Pastor el trío Los Incas, el cual tuvo actividad tan solo seis meses. En ese tiempo también participó en el popular concurso La Escalera del Triunfo, obteniendo un respetable tercer lugar, graba también su primer disco (78 R.P.M.) el vals Troki Moki (Discos Smith 7022 A). Luego de grabar otros sencillos para el sello Smith en 1957 Edith Barr lo apoya a dar el gran salto llevándolo a Radio Callao y conoce allí, entre tantas audiciones a Julio Jaramillo quien quedó impresionado con su talento vocal invitándolo a actuar en Guayaquil, Ecuador, donde dicho sea de paso, grabó también muchos discos sencillos (alrededor de 60) enfocando su repertorio en boleros y valses; estos últimos bajo un estilo distinto al tradicional vals limeño, interpretando al estilo norteño peruano, que no es otra cosa que la fusión de elementos andinos con las sonoridades típicas de ciudades norteñas como Trujillo y Chiclayo. Ya con una carrera musical consolidada en Ecuador, regresa al Perú en 1960 y se da un punto de quiebre en su carrera, decidiendo grabar solo boleros, al notar que en tierra inca no tenía mayor aceptación los valses de corte melancólico. Con la experiencia vivida en Ecuador continuó con su estilo particular de hacer el bolero y a su vez trajo al panorama musical peruanouna nueva visión, cambiando los esquemas tradicionales de los cuales estaba basado este género romántico. Con la presencia de Barrios, cambia aquel concepto tradicional de que los boleristas son cantantes refinados, esto cambia impulsando Barrios aquel estilo desgarrador al que hiciéramos alusión antes, acercando más aun este género al pueblo, que podía escucharlo en un gran teatro como en el bar de la esquina. Su éxito masivo fue tal que desde entonces fue considerado el bolerista más destacado del Perú.
En 1960, teniendo ya el reconocimiento de ser el Bolerista n° 1 del Perú graba en 1961 diversos discos, dándose a conocer en el norte de Chile viajando a la ciudad de Arica para presentarse con bastante éxito el 18 de septiembre en la Quinta El Rosedal junto con la orquesta del trompetista y arreglista cubano Orestes Pumarada conocido como “Puma” Valdez. En 1961 regresa a Chile, exactamente a la capital Santiago para realizar grabaciones acrecentando su fama a nivel internacional incluyendo ahora Estados Unidos, además de realizar presentaciones en el cabaret Picaresque. Justamente, en Chile es que se escuchó por primera vez el tema Marabú, importante canción de su repertorio que fuera grabado en Lima en 1957 en el LP del mismo nombre por el sello MAG (LPN – 2018) bajo los arreglos de los guitarristas “Chalo” Reyes y Santiago “Cato” Caballero.
En su extensa discografía la lista de éxitos masivos de este notable bolerista es considerable y de suma importancia para la música popular peruana. Canciones como Me Engañas Mujer, Te Alejas, Mi Niña Bonita, Rondando Tu Esquina, Cruel Condena, Nido de Amor, No Me Amenaces, Copas de Licor, Mentirosa, Amor de Pobre, entre otras son parte del cancionero peruano y latinoamericano.
El 15 de noviembre de 1988 se da uno de sus grandes logros tras presentarse en el famoso Teatro Olympia de Paris interpretando boleros como música de Chile y Ecuador. Entre los tantos reconocimientos recibidos por Barrios a lo largo de su carrera, uno de los más recordados es el entregado por la Organización de los Estados Americanos (OEA) “por su trabajo en favor del acercamiento de los pueblos a través del canto”. También fue reconocido en el año 2002 por el presidente chileno Ricardo Lagos quien lo condecora por su fuerte arraigo con el pueblo chileno.
Lamentablemente, el 3 de mayo del 2010 Lucho Barrios es ingresado al Hospital Dos de Mayo en condición grave y en riesgo vital, falleciendo el 05 de mayo a la edad de 75 años, siendo velado en el salón Nazca del Museo de la Nación.
ÍDOLO EN CHILE
Indiscutiblemente, Lucho Barrios desde inicios de la década de los 60 estableció un nexo muy especial con el pueblo chileno, el cual se consolida en 1969 al grabar junto a los hermanos Ángel y Arnaldo Silva la más célebre versión del tema La Joya del Pacífico, autoría de Víctor Acosta, inscrita en 1941 y dedicado al puerto de Valparaíso. Esta canción fue incluida en el álbum publicado en 1970 ¡Gracias Chile! (EMI / Odeón - LDC – 35242).
Barrios hasta 1970 grabó 36 sencillos (45 R.P.M) y seis LPS para EMI / Odeón de Chile, manteniendo una constante presencia en escenarios chilenos, siendo considerado parte de la denominada música cebolla música influenciada en la balada y el bolero muy popular en los años 60’s cuya denominación cebolla o cebollero, (también era llamado de esa manera en Perú) alude a su genio melancólico, lloroso y nostálgico. Además de Barrios, otros exponentes en este estilo son Ramón Aguilera, Luis Alberto Martínez, Jorge Farías, Lorenzo Valderrama, Rosamel Araya, entre otros.
Sobre las primeras visitas de Barrios a Chile, la escritora Marisol García comenta en su libro Llora, Corazón. El Latido de la Canción Cebolla (Editorial Catalonia, 2017), lo siguiente:
“El lazo de Lucho Barrios con nuestro país se afianzó desde entonces y para siempre: «Me encontré con una gran efervescencia por la música popular: tango, bolero y vals peruano». Para su sorpresa, el contrabando de discos ya hacía familiar su voz en el puerto, y por eso Odeón lo fichó de inmediato. Como contratación chilena, en diez años el cantante editó para esa compañía treinta y seis singles y seis LP […]. Fue «Lucho de los Barrios», «Lucho de los Puertos», un extranjero de trato llano, afable y encendido como el ánimo del proletariado nacional”.
Fue tal el impacto del fallecimiento de Lucho Barrios en Chile y en especial en Valparaíso que tuvo una despedida de compatriota, con expresiones del embajador de Chile en Perú, el entonces alcalde de Valparaíso y del reconocido cantante de cumbia Américo quien asistió al velatorio de Barrios en el Museo de la Nación y manifestó en dicha ocasión lo siguiente:
“El impacto de su partida es tan así de potente en mi país que no podía estar ausente en esta oportunidad. Como dijo ayer un artista popular: “La muerte de Lucho Barrios provocó un terremoto con epicentro en Valparaíso”. Yo creo que no fue un terremoto: fue un cataclismo, y el epicentro es seguramente el corazón de todos nosotros”
Otras manifestaciones populares en honor a Lucho Barrios fue la velatón en la Plaza Victoria en Valparaíso, un encuentro de boleristas en el Mercado Cardonal y una junta de firmas para bautizar una calle con su nombre.
El mismo Barrios dice en un instante en el documental Sonidos de una Joya, dirigido por Bárbara Trejo y estrenado en el año 2012, lo siguiente:
“Cuando grabé “La Joya del Pacífico” era un agradecimiento a Valparaíso, porque del primer momento que yo vine acá, el año ‘61, toda la gente me quiso. Les nació a ellos y a mí: es una cosa recíproca. El porteño es igual que yo, que soy también porteño, pero del Callao: es abierto, amistoso y bohemio. Pero básicamente el sentimiento y el cariño de la gente son los mismos”.
Se realizaron más homenajes, sin embargo, el más importante es la perpetuidad de su obra en la memoria y corazón de miles de chilenos, como del resto de latinoamericanos.
COLECCIÓN DE ORO VOL 1
El sello Orión de Ecuador publica en 1968 el álbum recopilatorio Colección de Oro Vol. 1, (LP – 12-25107) conteniendo sus grabaciones en el periodo que Barrios viviera en este país a finales de los años 50’s. Este álbum se caracteriza por contar en su repertorio solo con canciones en ritmo de vals al estilo norteño.
Barrios quien durante la década de los 60’s logró fama internacional y notable éxito masivo, con discos lanzados para sellos de países latinoamericanos, como en este caso publicado por Ifesa (LPI – 0802) en Venezuela, Orión (LP-2134) y Discos Heriba (SLP – 2134) en Bolivia, Sono Radio (LPL –2275) en Perú y en México la disquera Peerless (LPL 445) bajo el nombre de Ecuador Canta.
CANCIONERO
LADO A
1. JUANITA
Este es considerado el primer vals éxito de Lucho Barrios de la pluma de Pablo Casas Padilla (Barrios Altos, Lima, 13 de marzo, 1912 – Lima, 16 de enero, 1977). Juanita surge a finales de la década de los 50’s tras el pedido desconsolado de su amigo Andrés Benítez quien en aquel tiempo había perdido a su esposa, y conmovido Casas, compone en minutos en una servilleta esta sentida canción. Lucho Barrios interpreta con fuerte carga sentimental este tema, sin llegar aún al estilo desgarrador que lo catapulta en el bolero. Lo acompaña Wacho Murillo y su Conjunto.
2. EL RELOJ DE MI VIDA
Vals de estilo norteño compuesto por el poeta Luis Alberto Gálvez Ronceros (Chincha, Ica, Perú, 15 de abril, 1912, otros mencionan 1913 – Lima, 13 de diciembre, 1967), publicado en formato de 45 R.P.M. en Ecuador por la disquera Orión (45 – 2057) bajo el acompañamiento musical de Wacho Murillo y su Conjunto con el Requinto de Carlos Montalvo.
3. CUANDO LLORA EL CORAZÓN
Otro vals de Luis Gálvez Ronceros grabado en Ecuador, bajo la manufactura del sello Ifesa y lanzado por Orión, con el respaldo del Requinto de Carlos Montalvo, las guitarras de Espinoza y Rodríguez y el bajo de R. Alarcón.
4. NO TE VAYAS
Sentido vals autoría de Javier Arce, bajo el acompañamiento musical del Requinto de Carlos Montalvo, las guitarras de Espinoza y Rodríguez y el bajo de R. Alarcón. Notable interpretación de Barrios haciendo de la intensidad en su cantar una de sus mayores fortalezas.
5. RESIGNACIÓN
Composición de Emilio Peláez Montero (San Luis de Cañete, Lima, 1935 – Lima, 1990). Respaldado en las cuerdas por Espinoza y Rodríguez, el Requinto de Carlos Montalvo y el bajo de R. Alarcón. Lucho Barrios transmite el sentimiento de este vals que expresa temor y dudas sobre si el amor es correspondido.
6. SOLLOZOS
Autoría de Héctor Torres Becerra (Motupe, Lambayeque, Perú, 22 de febrero, 1931 – Lima, 18 de junio, 2024). En las guitarras, Montalvo, Bedoya y Espinoza. Notable interpretación de Lucho Barrios.
LADO B
1. TE PERDONARÉ
Otro aporte del compositor norteño Héctor Torres con el apoyo musical de Carlos Montalvo y las guitarras de A. Rodríguez y R. Espinoza. Este vals se grabó originalmente en Perú en el sello Discos Smith en disco de 78 R.P.M.
2. NO ME BESES (EL TÍSICO)
Clásico de la música criolla peruana compuesto por el guitarrista limeño Luis A. Molina Hostia (3 de noviembre de 1910). Su vals de mayor fama es No me Beses, conocido como El Tísico que relata la tragedia que vive un enfermo de tuberculosis que está internado en un hospital y que se popularizó de gran manera con el trío Los Embajadores Criollos, conformado por Rómulo Varillas, en la primera voz, secundado por Carlos Correa con la primera guitarra de Alejandro Rodríguez. La interpretación de Los Embajadores Criollos en 1959 le dio la forma definitiva y el sentido de esta recordada y conmovedora canción. Impecable Lucho Barrios en su canto bajo el respaldo del Requinto de Carlos Montalvo y las guitarras de A. Rodríguez y R. Espinoza.
3. MI DESVENTURA
Tercer y último vals de Héctor Torres Becerra para esta producción acompañamiento del Requinto de Carlos Montalvo y las guitarras de R. Espinoza y A. Rodríguez. La letra denota el desamor y desilusión del engaño por parte de la persona amada, algo que Barrios manifiesta con propiedad en su interpretación.
4. ENVIDIA
Composición del guitarrista Francisco “Paco” Maceda (Tumbes, Perú 15 de enero 1933 – Lima, 23 de abril, 2004). En la parte musical Carlos Montalvo y su Requinto y las guitarras de A. Rodríguez y N. Vásquez. Vals de estilo norteño, común denominador en esta producción.
5. MÁS PIERDES TÚ
Segunda contribución de Emilio Peláez Montero con el acompañamiento de Carlos Montalvo y su Requinto y las guitarras de A. Rodríguez y N. Vásquez. La interpretación de este vals posee mayor intensidad que otras realizadas por este querido bolerista.
6. MI DESPEDIDA
Vals de la composición de Luis Abelardo Takahashi Núñez (Ferreñafe, Lambayeque, Perú, 22 de noviembre, 1926 – Komaki, Japón,19 de diciembre, 2005). Esta canción de sentir lastimero muestra a Lucho Barrios con un nivel interpretativo conmovedor transmitiendo dolor tras la pérdida del ser amado. En lo musical, la responsabilidad recae en los guitarristas Carlos Montalvo, Bedoya y Espinoza.