Mambo a la Kenton / Bongó bongó

Formato: 78 rpm
Sello: RCA Victor - 23-1495
Matriz cara A: MBS 091707
Matriz cara B: MBS 091705
País de edición y fecha: Estados Unidos, 1950
Grabación: México
Estilo: Latino, Afro-cubano
Géneros: Mambo, Mambo kaén

La salida al mercado del disco con el tema Mambo a la Kenton fue en su día uno de los incidentes más sonados y poco éticos de usurpación de la autoría de una obra musical y que generó también una escandalosa confusión a la hora de repartir homenajes.

Armando Romeu González (La Habana, 1911-2002) es un nombre legendario en la historia del jazz en Cuba y dentro de la gran dinastía de músicos con ese apellido catalán, es el de mayor trascendencia internacional. Su formación musical transcurre bajo la tutela de su padre Armando Romeu Marrero y en la cercanía de notorios músicos que también fueron directores de orquestas: Alfredo Brito y Antonio Arcaño.

Desde que inicia su vida musical está unido al jazz, pues en La Habana era contratado por directores americanos durante las temporadas de verano que hacían en La Habana de las décadas del 20 y 30 del pasado siglo. Así tocó flauta y saxofón con bandas de músicos estadounidenses como la de Ted Naddy en el Jockey Club, y la de Earl Carpenter en el Casino Nacional.

En esos años tiene un extraordinario fogueo al trabajar con las jazz-bands cubanas de los Hermanos Palau, Los Diplomáticos de Maya y con la Siboney, de Alfredo Brito, con la que viaja a España en 1932 acompañando al Trío Matamoros, y se presenta en París, en el teatro Empire, y luego en Lisboa, Portugal.

Con 22 años, en 1933 funda su propia orquesta con la que debuta en el cabaret Edén Concert (luego Zombie Club y antecedente de Tropicana). Trabaja en el Hotel Nacional con la orquesta de planta, y con ella viaja a Perú, Chile y Argentina, donde la banda se rompe y Romeu pasa a tocar el saxofón con otra orquesta americana: la de Paul Wyer. Regresa a Cuba y se integra a la orquesta de René Touzet, que se presentaba en la Taberna Cubana y el Casino Nacional hasta que en 1940 funda la Bellamar, que dirigirá hasta 1942, y que se convierte en la orquesta del cabaret Sans Soucí, hasta el primer cierre de este centro ese mismo año. Comienza después su trascendente etapa al fundar su famosa orquesta del cabaret Tropicana, a la que llama a los mejores instrumentistas del momento y a los mejores arreglistas. Al frente de ella permanecerá durante toda la década de los cincuenta.

Entre los músicos era conocida la pasión y el profundo conocimiento que tenía Armando Romeu sobre el jazz y sus procesos evolutivos. Que a finales de los años cuarenta llamaran su atención las innovaciones que introducía Stan Kenton con sus diferentes orquestas, no es algo que debe asombrar a quien le conociera. Siempre al tanto de las últimas novedades discográficas que se lanzaban en Estados Unidos, Romeu seguía el trabajo de Kenton, que en 1947 había graba su conocida versión de El manisero, incorporando percusión afrocubana, la que venía acercándose con interés desde inicios del decenio. El trabajo de Armando con la orquesta de Tropicana estaba influenciado por la banda de Kenton, y llega a transcribir muchos de sus temas para su propia orquesta. Por ese tiempo, Armando Romeu decide escribir un homenaje a su ídolo. Se inspira, según Leonardo Acosta, en el tema kentoniano Artistry in Rhythm, al que hace un guiño en una parte de su pieza. Así surge Mambo a la Kenton.

En paralelo, Dámaso Pérez Prado (Matanzas, 1916 – México DF, 1989) venía perfilando el mambo y ya ganaba terreno desde que tomó la decisión de marcharse a México ante la poca receptividad de promotores radiales y representantes de casas discográficas ante el género que intentaba imponer. Mantenía, eso sí, un vínculo constante con La Habana, a donde acudía regularmente a cumplir contratos en teatros y radioemisoras, incluso al frente de una orquesta que presentaba como suya. Allí debió conocer la obra de Romeu. Llevó su partitura a México donde lo grabó a finales de 1949 en una de sus sesiones con la RCA Victor. Pero Pérez Prado declaró a la disquera que la obra era suya y la inscribió como tal. Mambo a la Kenton se publica por primera vez el 5 de enero de 1950 en disco de 78 rpm con Dámaso Pérez Prado como autor, teniendo por la otra cara Bongó bongó, de la autoría de Pérez Prado, que clasifica a ambos temas como género mambo-kaén.

Dos meses después, el 11 de marzo, la revista Billboard en su sección Record Reviews lo reseña ente los lanzamientos destacables con altos raitings en todas las categorías que evalúa la revista especializada. El crítico apunta: “El uso de los metales al estilo Kenton justifica el título. Es una pieza buena para bailar, pero lo más probable es que llame más la atención a los amantes del jazz.”

Las noticias sobre la excelente acogida del homenaje a Stan Kenton llegan a oídos y ojos de su verdadero autor, dando inicio a un largo pleito autoral entablado por Armando Romeu contra Pérez Prado. De haber habido entonces redes sociales, Stan Kenton no habría cometido el gran error que cometió, probablemente al guiarse por la información que ofrecía el disco y la reacción de la crítica especializada: en agradecimiento al “gentil” Rey del Mambo, Kenton interpretó con su orquesta y grabó un año después, en 1951, “Viva Prado”, compuesto por Shorty Rogers (entonces trompetista de su banda) en homenaje al genial Cara de Foca. Según Leonardo Acosta, “…Kenton ignoraba la injusticia que estaba cometiendo, pues el número debió titularse ‘Viva Romeu’ o ‘Viva Armando’.”

El crédito erróneo a favor de Pérez Prado se mantuvo en el prensaje del tema en disco de 45 rpm (RCA Victor - 51-5025), aunque la RCA Victor mexicana publicó otro disco de 78 rpm incluyendo como autores a Kenton y Romeu (70-8238) teniendo por la otra cara Mambo en sax, de Pérez Prado. El error se subsanó en sucesivos discos de larga duración y CDs donde se incluyó Mambo a la Kenton, reconociendo la autoría de Armando Romeu Jr., pero a veces aparece como una bola negra en textos y compilaciones curadas sin el debido cuidado.

En todo caso, el nombre de Armando Romeu Jr. continuó ligado a la cultura musical en Estados Unidos y al jazz, pues fue el director de la orquesta que acompañó a Nat King Cole en sus legendarias grabaciones en Cuba cantando en español. A inicios de los años 60 fundó y dirigió la Orquesta Cubana de Música Moderna de donde surgieron grandes nombres que hoy son figuras notables en el latin jazz y la música popular cubana.

No sabemos cómo quedó el vínculo entre Romeu y Pérez Prado, ni tampoco si Stan Kenton y Shorty Rogers llegaron a saber alguna vez la injusticia que cometieron. (RM)

Para escuchar Mambo a la Kenton por Pérez Prado:

https://www.youtube.com/watch?v=xW8stq4ZkJk

Para escuchar Viva Prado por Stan Kenton:

https://www.youtube.com/watch?v=lvxlgEOptwg

Tracklist:
A1 Mambo a la Kenton (Armando Romeu Jr.) mambo kaén
B1 Bongó bongó (Dámaso Pérez Prado) mambo kaén
Bongó, Tumbadora: Silvestre Méndez
Featuring:
Dámaso Pérez Prado - Dirección