Óscar López
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Antes que Silvestre Méndez, Benny Moré, Juan Bruno Tarraza o Cheo Marquetti, el cantante habanero Óscar López fue un artista pionero en tierras aztecas. Después de viajar con la compañía de Ernesto Lecuona a Puerto Rico, Argentina, Chile y Perú, Óscar partió a México en abril de 1941 como bailarín y cantante de la revista afro-cubana Batamú, con la cual ya había actuado en 1938 en el Teatro Martí de La Habana. El espectáculo, con coreografías de Armando Borroto y música de Obdulio Morales, lo lleva a actuar en varias ciudades del país y en el capitalino Teatro de Revistas Lírico. Al final de la gira, decide quedarse en México.
Su primero trabajo como solista es representar a Cuba en un número de la revista Alma América, estrenada el el Teatro de Bellas Artes de la ciudad de México. También colabora, por temporadas en el Teatro Esperanza Iris, con el cómico Mario Moreno "Cantinflas", y acompaña en el Teatro Follies a la rumbera cubana María Antonieta Pons. Con ella viaja en 1945 a Nueva York para un contrato en el Teatro Puerto Rico de la ciudad.
En la radio-emisora XEW, comparte programas desde 1941 con grandes figuras mexicanas como Pedro Vargas, Fernando Fernández y Jorge Negrete, acompañado por las orquestas de los maestros Agustín Lara, José Sabre Marroquín y Rafael Hernández. Su voz queda registrada en discos de marcas Fénix y Peerless. El primero en 1941, con la Orquesta Continental y la de Juan S. Garrido. Con la Peerless graba en 1946 acompañado por la agrupación del compositor-pianista cubano Bobby Collazo, de visita en México.
Su talento por el baile y el canto no dejan indiferentes a los productores de cine. En 1942 actúa en "La canción del plateado", inspirada en el folklore mexicano. Y en 1944, participa en el rodaje de "Los amores de un torero" (Pasión gitana), película protagonizada por Carmen Amaya y Joaquín Rodríguez "Cagancho". Aparece en el tema Negro de sociedad (de Arturo R. Ojea), con una coreografía de Julio Richards.
En 1946, Óscar López regresa por fin a Cuba, haciendo escala en Panamá donde comparte el escenario de Jardín Balboa con la rumbera Estela, ex-pareja de René. Volverá a México en diciembre de 1947, para interpretar el personaje de José Inocente en la producción cinematográfica "María La O", basado en la obra de Ernesto Lecuona y con Rita Montaner. Por fin, de 1951 a 1952, su última etapa en tierras aztecas, -en la que actúa de nuevo en la XEW, en el Teatro Lírico y con María Antonieta Pons- tenemos sus valiosos discos grabados con Bebo Valdés o con el Conjunto Los Guajiros del Caribe. (TM)
