Rubén Rada

El universo de Rubén Rada comenzó allá por los años 50 con un Big Bang musical encabezado por el rock and roll y el jazz. Rápidamente ese universo fue incorporando elementos de distintas latitudes del mundo: el candombe, el tango, la milonga, el pop, el funk; todos ingresaron y nunca más se fueron. Y a ese cosmos también llegó la siempre atractiva música brasilera con sus múltiples ramificaciones, desde el samba hasta el baión. Justamente por estas últimas aguas navega As Noites do Rio/Aerolíneas Candombe (2021), el recientemente editado disco de uno de los músicos más queridos y admirados de Uruguay.  

El álbum está dedicado a su madre, Carmen Silva, nacida en Santa Ana do Livramento, un pueblo en la frontera uruguaya, quien de muy joven se fue a vivir a Montevideo. A través de la cantante Tamy Duarte Acedo, Rubén conoció a Ronaldo Bastos, legendario poeta brasileño muy ligado a Milton Nascimiento y a partir de ese encuentro surgió la idea original de este nuevo trabajo. Empezamos a hablar y Ronaldo me comentó que en Brasil el apellido de la madre es más importante que el del padre. Ahí me dije: “voy a hacerle un disco a mi madre” porque siempre le canté a mi padre y en realidad él nunca me dio bola. Carmen fue la que me dio todo” cuenta el Negro desde su casa. Tal fue la conexión con Bastos que el uruguayo delegó en él casi todas las letras del disco: yo en tres semanas compuse y le mandé los temas terminados y él me frenó un poco, me pedía tiempo porque es poeta, piensa las palabras se ríe Rada cuando recuerda la labor en conjunto. 

Algún desprevenido podría pensar que un disco de Rada con música brasilera sería todo diversión, alegría y samba para bailar. Sin embargo, las canciones viajan por diferentes climas, desde ritmos bailables como Chao de Mangueira junto a Carlinhos Brown hasta el rock funk de Carolina o la dulzura de A Menina do Chapéu Azul. Si bien todavía no ha podido viajar a Brasil, el músico confía en que será bien recibido por la gente cuando la prensa pueda difundir el álbum. Lo que pasa es que la prensa brasileña tiene dos problemas: la covid y Bolsonaro. Pero hablé con muchos periodistas y estaban súper contentos, no entendían cómo pasé tanto tiempo sin cantar en portugués. Soy hijo de madre brasilera y padre uruguayo, tengo las dos partes, tengo el candombe y el samba metidos dentro del cuerpo.

Christian Alliana: Tu te defines como un artista de world music…

Rubén Rada: Es que siempre canté en todos lados, desde Yesterday hasta Garota de Ipanema, canciones folclóricas de Argentina, tangos, boleros. También tengo metido a los Beatles, Ray Charles, Marvin Gaye, Rubén Blades. Cuando grabamos con Opa en Estados Unidos el disco Magic Times (1977) aparecía en las bateas como jazz brasileño (risas). Ahí las compañías me hacían pensar de por qué no grababa un disco con un estilo sólo porque estaba todo encasillado y yo no estaba en ningún lado. Le costó mucho a la gente entender quién era Rada musicalmente.

CA: ¿Y en algún momento te planteaste seriamente hacer un solo estilo de música?

RR: Nunca, yo soy lo que soy, no puedo cambiar. Pero a fines de los años 90 cuando lo busqué a Cachorro López –ex bajista de Los Abuelos de La Nada y uno de los productores más exitosos de Latinoamérica– le dije claramente: todo el mundo dice que Rada es buen músico pero en el almacén no me fían por ser Rada así que necesito hacer un disco más comercial o que vaya para un lado. Así grabamos Quién va a Cantar (2000) y se convirtió en el disco más vendido de mi carrera.

El legado Rada continúa en su actual banda con la presencia de su su hijo Matías en guitarra y sus hijas Lucila y Julieta, en coros. Hace poco fue Julieta quien declaró que si regresara unos años atrás se plantearía realmente si dedicarse o no a la música ya que es un terreno muy inestable emocional y económicamente. A propósito de esto, el Negro no se sorprende por esos dichos ya que eso le pasa a todos los uruguayos, somos pocos y no hay muchos lugares donde tocar. Somos un país lleno de talentos y la gente se enoja cuando un artista se va afuera pero la realidad es que te tenés que ir. Si no tuviéramos a Argentina al lado, muchos artistas ya estarían trabajando de cualquier otra cosa.

Firme defensor de la música afroamericana, durante la pandemia Rada también editó Negro Rock (2019), en donde desde su visión rescata los orígenes del rock and roll –que era bailable hasta que lo agarraron los blancos y los ingleses y lo transformaron en algo más pop– y Parte de la Historia (2020), un recorrido en vivo de su trayectoria. En este último álbum hace hincapié en tres grupos fundamentales de la historia uruguaya: El Kinto, Tótem y Opa. Para el músico cada agrupación fue diferente: El Kinto fue el creador del Candombe Beat, con (Eduardo) Mateo habremos compuesto más de cien temas juntos; Tótem fue el grupo más arrasador de candombe rock, y Opa fue un grupo de smoking, con una dulzura y musicalidad increíble. Pero a las tres bandas les tengo que estar agradecido porque me dieron espacio para componer lo cual es muy difícil en un grupo.

CA: Tenés una trayectoria con la que bien podrías continuar sin necesidad de editar material nuevo. Sin embargo, estás en constante movimiento y relacionándote con artistas más jóvenes como el trapero uruguayo Pekeño 77 o la banda argentina de música electrónica Poncho…

RR: Yo no soy de la época del rap o el trap, pero tengo mucho respeto por lo que hacen los jóvenes porque no me gusta eso de que todo tiempo pasado fue mejor, eso es faltarle el respeto a los chiquilines y desanimarlos. Grabé con el Peke y el video tuvo como 15 millones de visitas y mis nietos me decían: “ahora sí que te fuiste para arriba, grabaste con el Peke” (risas), pero lo hice porque creo que el tipo es muy talentoso. A mí lo que más me molesta de la industria actual es que inventaron algo como Spotify para quedarse con la plata de los autores. A los cantantes de países comerciales les sirve porque pegan con una canción (canta Despacito de Luis Fonsi y Daddy Yankee) y figuran como artistas. Y realmente para mí artista es el tipo que sin tener toda esa escenografía, bailarines y parafernalia te puede emocionar igual; prefiero a Pablo Milanés con un pianito. Hoy estamos llenos de momentistas, no de artistas.

Luego de haber atravesado un año duro de encierro a la espera de la vacuna contra la Covid, el Negro Rada finalmente se muestra feliz con su vuelta a los escenarios y sus planes a futuro. Es una alegría para los músicos porque nosotros nos alimentamos de tocar en un doble sentido: comemos y nos alimentamos el corazón tocando frente al público. Estoy súper contento de volver a España y luego tener la posibilidad de ir a Japón. Y si pudiera tocar por América Latina sería aún más feliz. También tengo tres discos terminados para sacar y ojalá esté vivo para cuando el Candombe tenga el éxito de temas como La Lambada, Macarena o Despacito o como el reggae que recorrió el mundo. Yo quiero que la gente conozca el ritmo del candombe y lo use para componer.

El punto de partida es el candombe, pero las alternativas, palos, estilos, mezclas y combinación son infinitas. Rubén Rada ha explorado cientos de ritmos, desde lo clásico afrocubano a toda la negritud brasileña, pasando por el tango rioplatense. Esta es una muestra de sus muchas tendencias.

Playlist

1. Rubén Rada - Malísimo (live)
00:00:04
2. Rubén Rada - Dedos
00:05:19
3. Rubén Rada - Cha Cha Cha Muchacha
00:10:40
4. Rubén Rada - Negro Rock
00:14:27
5. Rubén Rada - Carolina
00:17:48
6. Rubén Rada feat Carlinhos Brown - Chão da Mangueira
00:20:47
7. Rubén Rada - Sólo Se Trata de Vivir (live)
00:24:42
8. Rubén Rada - Mandanga Dance
00:29:45
9. Rubén Rada - Baguala del Aburrimiento
00:34:51
10. Rubén Rada - Rock de la Calle
00:37:30
11. Rubén Rada - A Menina do Chapéu Azul
00:41:13
12. Rubén Rada - Candombe para Gardel
00:43:38
13. Rubén Rada - Bueno Que Me Voy (instrumental)
00:46:45
14. Rubén Rada - Quién va a Cantar
00:50:23
15. Rubén Rada - Mi País
00:53:40

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