El Sartén

A todo lo sorprendente que hay en Alexis Méndez, en tanto que persona, productor e investigador hay que sumar la música y su mas notoria cadencia: el baile, porque por el baile y su defensa es que “Los jueves son de Alexis” en El Sartén, un verdadero templo de la música caribeña desde hace más de 30 años en el casco colonial de Santo Domingo, en la República Dominicana

Le conocemos desde hace más de tres lustros y  la comunicación a partir de allí, desde ese primer encuentro en Santo Domingo ha sido constante, fluida y dominicanamente alegre y productiva.

Por lo que vive en El Sartén todos los jueves rescatando el baile y el baile de parejas sobre todo, nos comunicamos con Alexis para conocer de esa experiencia y sus antecedentes.

Lil Rodríguez: ¿Cómo fueron tus iniciales influencias musicales?

Alexis Méndez: Nací en Santo Domingo, capital de la República Dominicana el 11 de agosto de 1972, estoy ya en mis cincuenta años. Me crié en la  zona norte o parte alta de la capital. El barrio de mi crianza fue el Ensanche Espaillat. A pesar de crecer en un barrio popular tuve la dicha de tener padres  y abuelos responsables. Papá se esmeró en que tuviéramos mi hermana y yo y luego los que vinieron, una buena educación. Recuerdo que estudiábamos en un colegio de una clase social a la cual no pertenecíamos, pero eso influyó mucho en la ampliación de mi espectro musical. Yo crecí entre la salsa, el son, el bolero, el merengue, entre músicas caribeñas, mientras los chicos en el colegio escuchaban la música norteamericana, viajaban al extranjero, tenían discos, equipos y casettes. Eso nos ayudó.

En casa la música manejaba la cotidianidad. Mamá es una amante de la música y excelente cantante con una gran memoria. Mi padre, que es primero un gran bailador, tocó en una agrupación antecedente de Los Beduinos de Wilfrido Vargas. Su cuñado era el maestro Sonny Ovalles. Wilfrido me contó que en algún momento vivió en la casa de mi abuelo, una casa inmensa.  Mi padre fue percusionista y mi bisabuelo Pancho Peralta era acordeonista y por ahí me llega el amor por el merengue típico.

En mi infancia yo jugaba con la imaginación; lo mío era la música, escuchar a mis padres y a mi tío en la casa de mi abuela, bailar, pero básicamente jugar con las carátulas de los LP y duraba tiempo en esa actividad de observar las carátulas y comencé a dibujarlas. Sobre todo los discos de salsa y leía los créditos aunque no viera las caras, por ejemplo el Tite Curet a quien no había visto pero lo conocía mucho. No recuerdo cómo lo conocí pero fue ya crecidito. 

Los estudios

Esa etapa de la infancia ya muestra indicios de hacia dónde se encaminaban los pasos de Alexis Méndez, entre la música y las artes plásticas. Él lo ratifica:

Estudié guitarra, y artes plásticas en general, percusión, artes musicales. En casa había congas, campanas, güiras y güiro y tenía mi guitarra y cuando me interesé por el rock avancé más en la guitarra. Nunca, como mi padre, vi la música como un modo de vida. Y estudie artes visuales, publicitarias, licenciatura en publicidad y luego una maestría en comunicación. Una cosa fue llevando a la otra. Quería ser ilustrador, diseñador gráfico y vincularme a ese arte. Ya estando en la universidad descubrí que no se trataba solo de la publicidad y la diagramación sino que se abrió la posibilidad de la radio, de todos los medios en los que se colocaba publicidad. Me picó entonces la radio para construir paisajes y sonidos que solo están en la imaginación”

LR: ¿Y eso te funcionó?

AM: Tuve la convicción de combinar lo aprendido y todas mis pasiones y me ha funcionado en la vida. Era buscar la vuelta para que se dieran y me ha funcionado, Me gusta la música y el baile y las artes visuales, cine, pintura, diseño gráfico y he hecho diplomados en historia y antropología porque me apasiona el hombre y su accionar a través de la historia y sobre todo trato de impregnar un sentido socio antropológico a mis investigaciones.

Entré a trabajar como diseñador gráfico en el sello discográfico Kubaney y de ahí se fueron dando otras cosas, mi familia decidió en algún momento a poner una tienda de discos y crecimos vendiendo discos de todo tipo y cada uno en la familia tenía su especialidad. A través de esa tienda empaté con Kubaney y ellos luego de la parte gráfica me encargaron de compras y ventas, pasé a ser gerente de ventas y en ese tiempo me puse a hacer un catálogo de dominicanos en salsa, todos pertenecientes a Kubaney. La esposa de Mateo San Martín me vio haciendo el listado y me lo pidió. A los días me llamó para decirme que iban a hacer un álbum con eso, y ese álbum fue muy exitoso: Dominicanos en Salsa. Entonces Mateo se emocionó y me pidió que fuera su Coordinador de Producción. Fue el último escalón. Luego salí de allí y monté mi tienda de discos, propia, y la tuve que cerrar por varias circunstancias y retorné a la radio, a la publicidad y a la comunicación. Fue entonces cuando conocí al mas grande productor de radio y TV de República Dominicana: Jackie Núñez del Risco y él me pidió que hablara de música, en una sección todos los viernes. Me contrataron luego para la producción del espacio radial e incluso conducir.

Tiempo después decidí lanzarme con el programa “Música maestro” que duró 20 años al aire y que se transformó en “Música maestro Radio” que estoy dirigiendo en la actualidad.

No es fácil investigar

En cuanto a su afición investigativa , y por demás rigurosa, Alexis Méndez, define: Fue difícil introducirme en el campo investigativo porque  hay prejuicios, y si no te conocen te vetan. Fui rebelde e independiente. Para escalar se necesita entonces un empujón, como Darío Tejeda, investigador  y politólogo. Me falta mucho para aprender pero deseo convertir lo que sé en enseñanza para otros. Una vez se desató un veto contra mí y trataron de descalificarme, quitando mis méritos “porque yo no era músico” y eso me dio coraje y me dediqué a aprender a leer música y a dar ponencias, charlas musicológicas, etc. Debo mucho a Juan Tomás García, Tommy García, investigador riguroso, director del Museo de la Música en República Dominicana. Cuando yo llegué a Colombia él tuvo que ver, porque me dio los boletos para Colombia siendo viceministro, y me apoyó en otros viajes y periplos. Siempre estuvo presente en mi accionar. Casi que fue un Mecenas para mí. Ojala siempre haya en los ministerios de cultura a los que duela la música como algo intelectual, de raíz, no solo de entretenimiento. A Tommy le estoy agradecido por siempre.

LR: Precisamente estás muy conectado con Colombia…

AM: La conexión con Colombia se da a través de la música que vendíamos en la tienda y a través de Radio Guarachita donde se ponía bastante música de Colombia, Los Diplomáticos, Fruko y sus Tesos, Los Corraleros de Majagual, sobre todo la música del catálogo de Discos Fuentes y el propietario de la emisora era disquero, Radhamés Aracena y tenía su sello pero distribuía sellos internacionales y tenía su tienda de discos. Luego sentí cierta conexión con la salsa colombiana cuando explotó el Grupo Niche y se hizo conexión con Joe Arroyo, Fruko, Latin Brothers, Guayacán orquesta y otros grupos. Niche abrió una compuerta por donde entraron todos.

Luego entablé amistad con dos de Colombia: Rafael Bassi Labarrera de Barranquilla y Sergio Santana, de Medellín. Sergio es investigador pero además es Ingeniero Civil, y su trabajo lo puso en Dominicana, y mira, nos pudimos conocer en Santo Domingo. Luego se dio la posibilidad de yo viajar a Medellín a dar una conferencia en la Universidad de Antioquia. A partir de allí empiezan a pasar cosas, a conocer a gente valiosa, a una gestora cultural especialista en diseño y elaboración de proyectos. Es actualmente mi compañera y esa parte sentimental es importante. Quiero mucho a mi compañera y a Medellín.

LR: ¿Influencias?

AM: Mis grandes influencias musicales primeramente fueron los salseros que veía en las carátulas de los discos de mi infancia, Pacheco con una paleta pintando un lienzo, Celia Cruz, Willie Colón y Rubén Blades con Canciones del Solar de los Aburridos y eso marcó mi postura como salsero, vi esas conexiones, vi a Willie como conectado con Lavoe, fueron mis primeros análisis en la música, en la salsa. En cuanto al merengue fue Wilfrido Vargas y sus Beduinos, y Los Hijos del Rey, que eran jóvenes que hacían salsa y merengue, también Johnny Ventura pero ya Ventura no era de la generación de mi tío ni mía. Me siento honrado de haber vivido esa época de oro del merengue en la década de los 80, Dionni Fernández y su Equipo. Yo practicaba con los temas de Dionni, Alex Bueno, Fernando Villalona. No fui un fan, pero cuando veo a Villalona me inhibo y reconozco mi admiración por él. Volviendo a la salsa confieso que mi cantante preferido siempre fue y será Cheo Feliciano.

El Sartén y el Baile

El Sartén es un lugar que tiene 30 años, cumplidos en 2022 y siempre estuvo pensado para que la gente fuera a escuchar y bailar lo del Caribe. Fue creando poco a poco una comunidad de personas que se volvieron asiduos. Tiene un posicionamiento real y sólido. Alexis Méndez llegó a él por eso mismo, por el baile.

Tenía la necesidad de compartir mis sensaciones musicales con los bailadores. A mi me gusta bailar pero me encanta ver a los otros bailar. Que el baile sea el protagonista.

Fue así como surgieron “Los jueves son de Alexis”, previos diálogos entre nuestro amigo y la dueña del local.

Alexis destaca algo que es verdadero e importante: La actividad de salir a bailar se está perdiendo. Es cierto que en los barrios se baila de manera espontánea y así debe suceder en diferentes pueblos latinoamericanos pero yo recuerdo que la gente decía: esta noche voy a salir a bailar, y yo sentía que eso se estaba perdiendo y había que rescatarlo. El Sartén la ha mantenido, y un día jueves tomarlo, y hacerlo, y difundirlo y divulgarlo me pareció que era una buena idea. La actividad se ha posicionado tanto que ya he tenido ofertas de propietarios de bares que me dicen hagamos algo parecido a lo que tú haces en El Sartén, y resulta que con todo mi esfuerzo y lo que hago, El Sartén tiene su propia magia. Es como cuando se junta el hambre y las ganas de comer, todo encaja a la perfección.

LR: ¿Se mantiene este proyecto en el tiempo?

AM: Me gusta el hecho de poder difundir y traer de vuelta el salir a bailar, que la gente sepa que hay un lugar  donde  puede ir a bailar, un lugar en la zona colonial de Santo Domingo, una actividad estupenda que habla de quiénes somos los caribeños, una actividad donde se baila merengue, son, salsa, bachata, cada jueves porque depende del público que llega. Hemos tenido hasta escuelas de bailes. Tenemos un público que va a disfrutar, primero del baile, y luego del resto. Todos los jueves estoy ahí, animando, micrófono en mano, colocando la música, siempre saludo a las personas cuando llegan y les recuerdo que la música la ponen ellos. Cada jueves es distinto. Hay temas que yo voy colocando. Una vez al mes tenemos música en vivo, que ya eso es otro cuento. La magia de la música en vivo, sones por lo regular, grupos de sones , grupos que te ponen a bailar merengue. También el bolero ha estado presente y los jueves que hacemos música en vivo llega mas gente. Llega el habitual pero llegan otros atraídos por la agrupación que se presenta o porque le gusta más la música en vivo. Es una dinámica diferente pero siempre el protagonista será el baile.

El Sartén es un sitio estrecho, es más largo que ancho, como si fuera un callejón. Los dueños podrían ampliarlo, pero perdería su magia. A la gente le gusta estar allí, y así. A veces chocamos mientras bailamos, pero eso es parte de la chulería, como decimos los dominicanos, de El Sartén.

Mi perspectiva con esta actividad es difundir lo que es el baile de pareja, socializar a través del baile y mantenerlo. Nuestro Caribe tiene en el baile mucho sincretismo. Tenemos en la herencia española cómo movemos las manos, herencia francesa en el baile  enlazados, apretados, a la parte aborigen en lo colectivo y las caderas y la cintura nos llevan a África. Tenemos de muchos lados y esto nos da una forma de comunicación muy particular a través del cuerpo, del contacto corporal en el baile de pareja. Cada baile tiene su estética y cada música tiene su baile y hay que mantenerlo para que no se pierda. Esa es mi lucha. Sabrosa, pero lucha al fin y al cabo.

"No se trata de bailar por bailar. Es asunto de entregar el alma en la pista, de liberar energía y construir momentos inolvidables", dice Alexis Méndez

Playlist

1. Abraham Rodríguez Jr. - Iroko
00:00:28
2. Celia Cruz y Johnny Pacheco - Tres días de carnaval
00:05:39
3. Conjunto Guantánamo - Y yo gangá
00:10:35
4. Charanga de la 4 - Buchi Pluma
00:14:36
5. Edwin Bonilla - Adivíname y olvídate
00:19:54
6. Septeto Acarey y Gilberto Santa Rosa - Enamórate bailando
00:25:15
7. Rodhen Santos - El merengón
00:30:38
8. Los Jubilados - Hoja seca
00:34:20
9. Los del Caney - Jaleo
00:40:14
10. Orquesta Original de Manzanillo - El cinturón del taxi
00:43:49
11. Guayacán Orquesta - Pau Pau
00:49:04
12. El Gran Combo - Sin salsa no hay paraíso
00:53:42
13. Dimensión Latina - Que bailen to's
00:57:25
14. Son Varadero - Los huevos del gallo
01:00:35
15. Charlie Rodríguez y Rey Reyes - Adiós Carmelina
01:04:02
16. Sonora Ponceña - Umi-Laye
01:10:23
17. Johnny Ventura - El mangú
01:16:05

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