El artista Spencer Tunick crea “arte viviente” en todo el mundo al dirigir multitudes de personas desnudas a través de entornos urbanos y naturales para luego fotografiarlos. A la llamada del fotógrafo acuden miles de personas que, sin importarles el clima, se vuelven locas por formar parte de una multitud en cueros. Desde 1986, este polémico fotógrafo estadounidense de origen judío ha centrado su trabajo en hacer composiciones artísticas que inmortaliza en lugares arquitectónicamente muy conocidos internacionalmente o con una importante historia detrás. En ocasiones puede hacerlo en tareas cotidianas como coger un autobús o simplemente caminando por la calle.

Ahora es noticia porque el artista ha anunciado que volverá a Australia. Tunick la visitó la última vez en 2010 para fotografiar a miles de personas desnudas en los escalones de la Ópera de Sidney, obra emblemática de Jorn Utzon. Esta vez planea usar la Chapel Street de Melbourne como lienzo dos días en julio dentro del festival de arte Provocaré.

Tunick ya expresó sus deseos de volver a trabajar en ese país y subrayó la sesión fotográfica de desnudos masivos que hizo un día húmedo de 2001 en el Princes Bridge. Casi 5.000 personas quieren ser parte de una obra de arte. Son unos valientes. Solicita para sus proyectos a personas mayores de 18 años y de cualquier tamaño, nacionalidad o etnia.

Al igual que su sesión de 2001, el evento de julio se hará llueva, granice o haga sol. Si le preocupa el frío, no lo haga, porque los participantes estarán desnudos durante largos períodos de tiempo, han avisado desde Chapel Street. Hacer fotografías es un proceso muy lento y ya eso de que quien se mueve no sale en la foto.

Las fotografías se incluirán en una colección titulada Return of the Nude que Tunick espera que ayude a eliminar la idea del cuerpo representado como una “escultura sublimada”. La oportunidad es única porque formando masa se ven menos los kilos.

El artista regala a los participantes una copia firmada. Si estás en Australia apúntate.