Rocío Márquez & Enrike Solinís - Omnia Vincit Amor (Universal Music, 2020)
Con un ritmo de producción vertiginoso, casi a disco largo por año, tras entregar varias piezas que han ido marcando el impulso del nuevo flamenco -desde la inspirada ‘El Niño’ en 2014 hasta la madurez de ‘Visto en el Jueves’, del año pasado-, la onubense se desmarca con este trabajo ambicioso, extraño, original y rotundamente genial. Aliada con el virtuoso de la guitarra Enrike Solinís y el grupo de música antigua que este fundó en Bilbao en 2006 (Euskal Barrokensemble) traza conexiones entre ‘El amor brujo’ de Manuel Falla y las palabras del poeta romano Virgilio (de ahí el título: “el amor lo vence todo”) bajo una mirada contemporánea.
Su visión no pretende reinterpretar, sino actualizar y rendir homenaje; en una época donde triunfa lo grandilocuente y rotundo, esta extraña pareja (Márquez y Solinís) lo apuesta todo a los pequeños matices, a la tremenda voz de ella o al sutil sonido de instrumentos con historia como una guitarra barroca, una tiorba, un lavta turco o un archilaúd. Juntos traen al presente la fuerza de la mítica obra de Falla (que el guitarrista vasco ya revisó en 2017 en su disco ‘El amor brujo’ junto a la voz de María José Pérez) en este festín donde suenan jotas, tarantas y canciones del amor dolido.
Rocío Márquez siempre incide en las entrevistas en la importancia de reivindicar referentes femeninas en la historia del arte sin darse cuenta de que su figura ya es una de las grandes influencias para las nuevas generaciones.
José Fajardo
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