La Reina de Instagram tiene 98 años
Marie Ulmer ha revitalizado la redes con picante actitud; lo suyo es ser musa indiscutida de una fotógrafa norteamericana
¿Se puede ser una friki con 98 años? Si, sin duda se puede. Y solo hay que ver a la reina de Instangram, que tiene esa magnifica edad y está totalmente desinhibida. Si a cierta edad no haces lo que te da la gana es que no sabes gestionar el tiempo que te resta. Porque hay edades que el tiempo no suma sino que resta.
Pero hay un tiempo todavía para los ancianos que son jóvenes, es el ahora contemporáneo y una anciana ha tomado la red social por asalto, convirtiéndose en nueva sensación viral. La vejez es un tiempo de asimilación, en el cual para lo que queda lo mejor es hacer lo que te da la gana.
Marie Ulmer ha revitalizado la redes con picante actitud; lo suyo es ser musa indiscutida de una fotógrafa norteamericana, Candace Karch, que la captura en su elemento: tendida cual prima donna en un sofá, practicando tai chi, luciendo pelucas estrafalarias o tatuajes temporales, configurando mundos de fantasía entre globos de colores, lavando los platos, o jugando a ser Carmen Miranda, que dice que es en realidad quién siempre quiso ser.
La mujer –que pasa los días en una residencia de ancianos de Filadelfia, Estados Unidos– ejerció de ilustradora para Philadelphia Free Library durante 35 años y continúa pintando con variedad de estilos y medios: el óleo y la acuarela, la cerámica, la joyería y los cristales; la naturaleza muerta y –muy especialmente– sus autorretratos.
A la salida del centro en el que vive en Filadelfia, dando un paseo por el campo con unas gafas verdes o comiendo una ciruela… los retratos de esta anciana han conquistado los corazones de los usuarios de la red social que, conmovidos por la ternura que despierta la señora Ulmer, son incapaces de no dar “me gusta” a cada una de las fotos que se cuelgan en la cuenta @sugarbeam.
Le encanta ser el centro de atención y en ocasiones actúa como una diva. Marie se viene arriba frente la cámara. Cuando está posando es natural haga lo que haga dice su fotógrafa de cabecera. Luego, sobre los miles y miles de “me gusta” con la fama centelleante en redes sociales, aclara: “Marie no es realmente consciente del alcance que tiene Internet, pero cuando se lo explico entiende que es más conocida que el que únicamente aparece en el periódico local”.
Circunstancia que, a decir de su amiga estimula la creatividad y espontaneidad posando más y mejor, entre charlas donde planean cómo celebrarán el cercano 100 cumpleaños. ¿Acaso con un contrato editorial bajo el brazo.? Parece que así será..
Y es que todos queremos llegar a viejos, pero no serlo. He aquí un personaje que sabe disfrutarlo. No me importaría ser como ella.