Violeta o La Vida

Reivindicativa, desesperada a veces. Llegó a exponer en el Louvre, jugaba a hacerse la muerta. Era una mujer debatiéndose entre los extremos.

Mercedes Sosa: Una voz para lo eterno

Carecían de lo necesario pero no de lo importante: el amor .

Toña La Negra: La Voz del Amor

Me respondió que le decían Toña La Negra y que era de un barrio del puerto.

Celeste Estremecimiento Mendoza

Su vida es resumen de lo que siempre cantó “a usar los sentidos, yo le llamo vivir”

Susana Baca: El exorcismo de la memoria

Y desde allí canta al dolor que con el paso del tiempo siempre trastoca en melancolía.

Paquita la del Barrio : La reina del despecho

Paquita no se anda con chiquitas y además de despacharse agusto en un país machista por excelencia les grita: ¿Me estás oyendo, inútil?

Carmen Miranda: “Bananas is my business”

Hasta su última aparición Carmen Miranda quiso ser ella. Apareció en la televisión con sus tacones imposibles y sus tocados inverosímiles. La frutería de su cabeza la hizo única.

María Teresa Vera: el bolero no se canta, se sufre

Hay que ser nieta de esclavos para cantar que veinte años no son nada.

Los Ovarios del Bolero

Grandes mujeres, divas irreductibles, diosas que inspiran y cantan boleros con pasión.

Rihanna: Nadie puede pararme darling

La de Barbados es mucho y se ha reinventado completamente asumiendo el handicap de diva del pop, pero construyéndose una personalidad que arrasa.