Ese chureo de Cerrero
Esto es Chureo en la Mañana, fruto de la exploración de Cerrero en el Pacífico colombiano. Una exclusiva Gladys Palmera.
Cerrero significa crudo y sin domesticar. Es algo hipnótico, dicen, porque es natural y proviene de la raíz. Yendo más allá, es atractivo y provocador como un corrientazo que recorre el cuerpo, como si una mística ancestral se apoderara de nuestra conciencia. Siguiendo ese precepto aparece Diego Gómez y pone a su alter ego, Cerrero, a hacer música emocional, natural y sin domesticar.
Pero ahí no termina la cosa. Como productor de Llorona Records que es, Cerrero ha dedicado gran parte de su tiempo más reciente a la producción musical y dirección artística de Discos Pacífico, filial de Llorona en alianza con #territoriosdeoportunidad. Así ha presentado discos tan poderosos como Voy Pa’allá, de Semblanzas del Río Guapi, Batea, de Bejuco y Berejú, de Agrupación Changó.
Discos Pacífico ha sido también la oportunidad de descubrir nuevas voces y artistas para seguir experimentando y creando en el universo de este productor colombiano, conocido por explorar los encuentros del dub jamaiquino con las músicas ancestrales de Colombia.
Así nació Chureito en la Mañana, una colaboración entre Cerrero y el grupo tumaqueño Bejuco, primera entrega de una serie de canciones que, desde el sonido crudo y minimalista del dub electrónico nos lleva al lado más íntimo de lo que ha sido la experiencia de inmersión en los sonidos de la costa del Pacífico colombiano para Cerrero (tierra de currulaos, berejús, patacorés y decenas de ritmos más). En este caso a la ciudad costera más grande del Departamento de Nariño.
El llamado chureo es parte esencial en la forma de cantar en Tumaco, un legado del África primitiva que sólo sobrevivió en los lugares más apartados de Nariño. Una melodía muy corta, percutiva y arcaica, cómo el canto del pájaro o de una chicharra en la selva, un llamado, un lamento. Cada cantante aporta su chureo, que al sobreponerse en una polifonía sublime se transforma en el trance que lleva la música al plano más espiritual y profundo.
Chureito en la Mañana es una canción inspirada en esta tradición, pero también en el zouk del Caribe antillano y los afrobeats que se toman los barrios de Tumaco. Cerrero nos presenta la voz prodigiosa de William Martinez, cantante de Bejuco, y el encuentro creativo del propio Cerrero con Cankita, emblema de la nueva generación de artistas de la región.
Además de este lanzamiento, Cerrero prepara el lanzamiento de una serie de remixes de Semblanzas del Río Guapi y Bejuco durante los meses de octubre y noviembre. Eso si, sigue pendiente del dub jamaiquino y de ese sonido de raíz que exploró junto a la gran Lucía Pulido, Los Gaiteros de San Jacinto, Coladera o El León Pardo.
Radio Gladys Palmera te presenta, pues, en exclusiva Chureito en la Mañana.
No te olvides de hacer presave.