Frenesí y actitud en la primera jornada del Womex

Publicado el 21 de octubre de 2015
Alex García y Darío Manrique nos cuentan qué están viviendo desde Budapest

 

El Womex 2015 vivió ayer su primera jornada en Budapest. Al margen de las docenas de interesantes stands que se han reunido en esta feria global de músicas del mundo, se sucedieron tres notables actuaciones en la carpa situada al lado del vanguardista palacio de las artes Müpa.

En primer lugar, apareció Pierre Kwenders, congoleño afincado en Canadá que pervierte ritmos de su país como la rumba con potentes bases electrónicas. Escoltado por un DJ y un guitarrista/teclista, Kwenders se reveló cómo un cantante magnético en sus inflexiones vocales y sus movimientos. Encajaría a la perfección en un Sónar, por ejemplo.

Tras él, Vaudou Game, plato fuerte de la noche. El togolés Peter Solo, puro carisma y actitud, mostró junto a su banda de músicos franceses (país donde reside) un directo extraordinariamente rotundo y conjuntado, que a ratos que recordaba a los África ’70 de Fela Kuti o a los mejores momentos de James Brown y sus J.B.’s. Todo ello con la presencia inescapable del descamisado Solo, radiante a la guitarra, cantando o explicando las bondades del vudú, concepción naturalista que da nombre a su proyecto y que, dijo, había nacido en su tierra (y que poco tiene que ver con los muñequitos y las agujas).

Los colombianos residentes en Los Ángeles Palenke Soultribe juegan con la cumbia, las programaciones electrónicas y la percusión con frenético espíritu punk. No hubo ocasión ni para respirar en sus 45 minutos de actuación. Ninguna sutileza, mucho baile y diversión.

El Womex continúa hoy con otra tanda de conferencias, encuentros y conciertos, y os lo seguiremos contando a lo largo de todo el fin de semana.