Buana Buana King Kong
De Amsterdam a Nueva York, de Jerez a Pamplona. Gómez Gufi te ofrece las imágenes y el sonido del Flamenco Airlines.
Nueva York se vuelve muy pequeño cuando viajas con flamencos. Pasas por el Empire State y te asalta el estribillo: “Buana Buana King Kong” y ves como Sara Baras no se aguanta en la butaca y se lanza a bailar para 1.825 niños que son el futuro del flamenco. El Flamenco Festival de Nueva York lleva todo el Siglo XXI sembrando flamenco entre los niños de la Gran Manzana, así que no se asusten si la próxima estrella del flamenco sale de esa ciudad.
“Buana Buana King Kong, Buana Buana King Kong” (Paco de Lucía Sextet)
Me gusta andar en Nueva York y me gusta pasar por el lado del edificio Flatiron, está al lado del Madison Square Garden y cuentan que cuando lo construían al principio del siglo XX generó un microclima con frecuentes ventoleras -que dicen- que levantaba las faldas de las mujeres. Yo vi el edificio por primera vez en un comic de Will Eisner.
JEREZ EN NUEVA YORK
Se celebraba el Festival de Jerez y estábamos en Manhattan con María Terremoto que nos conectó con la saga familiar. Pero también estaba el guitarrista Antonio Rey y salió a cantar su hermana Mara a la que solemos ver en el Corral de la Morería (enorme en el espectáculo “camino” de Jesús Carmona). Mara Rey en Nueva York hizo temblar los rascacielos y a mí me hizo llorar, de gozo. Otra vez.
AMSTERDAM
Ir a Amsterdam y no visitar a Rembrandt o a Van Gogh en sus museos, es como venir a España y no escuchar flamenco. Bueno, pues escuchar flamenco en Amsterdam es otro gozo. Te vas paseando entre canales y de pronto llegas a una bahía con barcos enormes. Y dentro de un edificio acristalado se celebra la Bienal. Los Mellis dan un curso de palmas y Jesús Guerrero hace bailar a varias docenas de holandeses. 50 personas asisten a la introducción a la Accademia del Piacere. Aquí hacen los deberes.
Sales del concierto (fabuloso) de Dani de Morón y te dan un vino. Estas degustando el concierto y el vino y te encuentras con un tipo que te mira fijamente, pregunto si nos conocemos.
-Yo a tí sí, del Planeta Jondo.
Me suena, pero la conversación es un poco “Star Trek”.
-¿No nos habíamos visto antes?
-En el facebook.
Brindamos mientras aparecen los artistas a contar y compartir con el público lo que acaba de ocurrir y hasta Duquende se arranca a hablar.
Buena costumbre esta de asociar el flamenco y el vino -¿a quién me suena eso?- en el New York City Center te venden un vaso (hermético) -y el vino- para que puedas degustar el espectáculo.
El guitarrista sevillano Tino Van Der Sman presentó un libro ante sus compatriotas al que asistió El Payo Humberto, guitarrista holandés que estuvo con Morente en los días en que Enrique iba a colegios mayores y universidades ofreciendo el lado peleón del cante contra la dictadura de Franco..
Da igual donde veas a Rosario La Tremendita, es un subidón. Si te va el funky puedes vivir al compás de su bajo eléctrico. Si eres flamenco te arropa el sabor de varias generaciones. Si te va el contemporáneo, te pone el reloj al día de mañana. Si eres punki, te hace botar hasta el techo. Lo mejor es que no quiere parar, se ha encontrado a sí misma y te pone en órbita sin cohete.
Celebramos en el Corral de la Morería el cartel del Flamenco On Fire y vemos a María Terremoto y Mara Rey sube a darle a la bulería y al compás. Mara está con el bailaor Jesús Carmona en “Camino” hasta el 14 de abril.
El Flamenco On fire de este año se celebra del 20 al 25 de agosto está dedicado a “Generaciones, mitos y promesas” y presenta tres espectáculos de baile (Sara Baras, Israel Galván y Rocío Molina) que han triunfado en todo el mundo. Sara Baras con Sombras, en el que Israel Fernández hace una maravillosa versión por Morente del Pequeño Vals vienés, donde los bailaores flotan, de verdad.
No es la única referencia a Morente porque María Terremoto nos sorprende en Nueva York cantando por Morente. Enrique fue un sabio y cantaba alguna de las cosas del abuelo Terremoto de Jerez.
Maria nos descubre que su padre Fernando Terremoto estuvo con Israel Galván que en Pamplona hace FLA.CO.MEN, un espectáculo brillante en el que destacan Caracafé, Tomás de Perrate y Proyecto Lorca.
Rocío Molina presenta Caída del Cielo y Rocío Márquez canta con Jorge Drexler. Lo de Pamplona en agosto con el flamenco es pa’ verlo. También estarán Ketama y los balcones, la jam, los debates de Gaz Kaló, los pinchos, la casa Sabicas (y el bar heavy de en frente), y cuando volvemos a Madrid ya estamos de nuevo en danza; nos lo recuerda Diego Guerrero de los miércoles flamencos del Berlín que ahora coordina Bandolero.