La Ley del Juego, de Santiago Navas
Una exclusiva Gladys, lo más reciente del productor colombiano Santiago Navas, La Ley de Juego, folktrónica latinoamericana en estado puro.
Santiago Navas regresa con un nuevo trabajo, La Ley de Juego, un álbum donde a través del sampling y la síntesis en la música electrónica, le da expresión y ritmo a los testimonios sonoros de una identidad latinoamericana, que toman voz para construir un universo onírico en la cual se cuestiona nuestra localidad y memoria.
En sus propias palabras, a lo largo del continente habita una riqueza sonora que se vive desde la nostalgia andina hasta el sabor de las costas. Una riqueza que entona a lo largo del territorio los tonos agresivos de la inconformidad, los ritmos alegres del festejo y la euforia de la celebración.
Este trabajo multidisciplinar nos presenta un recorrido por los ciclos de la vida, en donde un personaje animado, creado por el ilustrador Sergio Moreno, habita un mundo surrealista construido desde el recuerdo.
El productor bogotano Santiago Navas se mueve entre diferentes ámbitos. Se dio a conocer en 2016 con el EP Problemática, llamado según Vice, un groove infeccioso, una onda housera, percusiones sumamente tropicales y valiéndose de sampleos orgánicos, (con los que) lograba un acercamiento a la vida en los municipios afectados por problemáticas tristemente comunes en este país como la escasez de agua o la falta de alimentos.
Luego grabó Punto de Fuga, camino de house, música electrónica, pero que de igual manera lo metía en los terrenos de la folktrónica. Ese trabajo fue el comienzo de su relación con el sello In-Correcto y también su apertura hacia la producción de otros artistas. En este caso de discos como Canciones Crudas 1 y 2, de La Muchacha; Templo Komodo, de Briela Ojeda; y Los Días, de Ana María Vahos, entre otros.
En este álbum de catorce cortes, Navas se rencuentra con la experimentación electrónica, explorando con nuevas sonoridades que van de la salsa al trip hop, surcando el terreno con sus habituales y característicos beats. Además, el disco cuenta con diversas colaboraciones entre quienes destacan Lalo Cortés y Felipe Orjuela.