Camilo Lara visita la Colección Gladys Palmera: “José Alfredo Jiménez fue el punk original”
Para el músico mexicano, Pérez Prado y Bola de Nieve son tan transgresores como los rockeros más cañeros.
El músico y productor mexicano Camilo Lara describe a grandes compositores y artistas como José Álfredo Jiménez y Dámaso Pérez Prado como si se trataran de estrellas del rock and roll más cañero. Y es que para Camilo, lo son. “Junto a Morrissey, José Alfredo es mi outsider favorito”, nos dijo cuando visitó la Colección Gladys Palmera recientemente.
Ese ir y venir encapsula perfectamente su gusto y filosofía a la hora de crear, siempre revalorizando la música mexicana en el panorama mundial. Lara ha editado cinco discos bajo Instituto Mexicano del Sonido, fue asesor musical en la película Coco y recientemente produjo Un mundo raro, un disco tributo a José Alfredo Jiménez en el que aparecen artistas de hoy como Bunbury, Julieta Venegas y Juan Perro.
Invitamos al polifacético artista, melómano y coleccionista empedernido a perderse entre nuestros vinilos latinos en nuestra sede en El Escorial para charlar de sus influencias y su carrera. Aunque en algún momento amasó 45,000 vinilos (hace poco los donó a un espacio cultural en la Ciudad de México), Camilo sigue amando los discos, y sobretodo la música latina de antaño. Conoce bien las ciudades donde va de gira porque siempre sale a comprar discos -su última adquisición: “un disco polaco, no sé el artista pero tiene un ordenador gigante en la portada. Seguro va a ser buenísimo con esa portada“, dice.
Si de joven, Lara era super fan del New Wave (en el colegio su primer grupo se llamó Jesucristo y los Asquerosos Estúpidos), descubrir a Pérez Prado y un disco de niños de Juan García Esquivel titulado Burbujas fue el detonante que encendió la mecha de su pasión por la música mexicana. “Burbujas, Bauhaus y los Smiths fueron los discos de mi niñez”, asegura.
Su adicción a los vinilos empezó temprano. A los 16 años, Camilo ya se perdía por el barrio obrero de Tepito al norte de la capital mexicana en busca de discos. Ahí conoció a grupos tropicales nacionales de los años cincuenta como la Sonora Santanera. “Me hicieron pensar que la música de baile no era nada más lo que tocaban en las fiestas de jóvenes. El baile a través de los tiempos ha sido la pauta para hacer conexión. Es el momento de la democracia. En la pista de baile, todos somos iguales“, dice Camilo.
Escucha la playlist narrada por Camilo Lara para Radio Gladys Palmera:
Después de trabajar por varios años como ejecutivo del sello EMI en México, su afán por el coleccionismo lo llevó a lanzarse como artista y su primer disco, Méjico Máxico (Noiselab, 2005), es un collage de samples de su arca de vinilos mexicanos, incorporados a bases electrónicas. “A eso me dedico, a buscar sonidos. Si no son cosas para samplear son para referencia,” dice Camilo. “Ahora me interesa más que suene a samples [aunque son tocadas]”.
Sin embargo, nadie es profeta en su tierra. Aunque Camilo es un embajador de la música mexicana a nivel mundial, nos confiesa que donde más le cuesta ser aceptado es en su propio país, donde tiene públicos que lo aman o lo odian. “Tristemente, México es muy clasista, la clase media es muy conservadora. Toda la música que es popular les causa cortocircuito“, dice Camilo, quien también ha producido varios discos del popular grupo de cumbia sonidera Los Ángeles Azules, considerado kitsch por ciertos sectores, pero todo un éxito en ventas, sin duda gracias a la actualización y colaboraciones orquestadas por Camilo.
Debido a la polarización del público mexicano, Camilo aún no ha presentado en vivo en México su proyecto paralelo, Mexrrissey, en el que hace versiones mexicanizadas y en castellano de éxitos del líder de The Smiths. “Toqué dos puntos de cortocircuito. La mexicanidad y Morrissey”, dice, pese que el grupo ha hecho giras por Inglaterra, Estados Unidos y otros países.
Pero su amor por la música de raíz y su pasión por rescatar del olvido a sus ídolos musicales pueden más que cualquier crítica. Camilo Lara aspira a convertirse en un músico universal y que la música mexicana también se considere como tal. “Eso lo aprendí con José Alfredo. Todo el mundo ha escrito de amor, tristeza, novias que lo dejan….pero contar una historia muy pequeña esa es la que te hace ser universal“, afirma.
Antes de culminar su visita a la Colección Gladys Palmera, Camilo nos deleitó con una selección de la música que lo ha marcado con un playlist narrada por él mismo, “track by track”. Pérez Prado es el “Prince” de Cuba, Bola de Nieve “un poeta, un visionario, estaba adelantadísimo a sus tiempos” y Aníbal Velázquez “un rebelde y un transgresor”.
En Radio Gladys Palmera, no podríamos estar más de acuerdo.
Aprovechando su visita a la Colección Gladys Palmera en El Escorial, en Madrid, en este playlist "track by track" en exclusiva para Radio Gladys Palmera, Camilo Lara escoge alguna de las canciones de nuestra bóveda y en sus propias palabras, nos explica la influencia que estos artistas en él.