Hace tan solo 60 años apareció en el mundo del rock un tipo del que podía decirse que cambió el mundo. Joven, sexualmente ambiguo, estrecho de cintura, pelo llamarada, maquillaje de kabuki japonés, mono de seda roja y botas de charol, se presentó en el célebre programa “Top of the tops”. Los que lo vieron y fueron muchos, sufrieron una conmoción.

Algo cambió en el pop y David Bowie se convirtió en una estrella. En el Victoria and Albert Museum, uno de los grandes de Londres, se ha inaugurado una exposición de el icono de la música. El comisario de la muestra dice que las colas en las puertas indican la cantidad de personas a las que rey del glam había cambiado sus vidas.

Bowie, como todos los que piensan pasar a la historia, ha guardado sus pertenencias. En su gran archivo en Nueva York de más de 60.000 artículos- trajes, fotografías, diseños, películas – los comisarios de la exposición han elegido más de 300 para Londres.

El traje de Starman tan diminuto, será un punto culminante en la exposición, porque en esos días llevaba una extraña dieta a base de cocaína, leche y pimientos rojos. La exposición es una exploración y una celebración del espíritu creativo del artista. “Bowie ha jugado un papel crucial en la formación de la sociedad moderna debido a su enfoque en la expresión personal”

Lo extraño es que no ha tenido ningún control sobre la muestra e incluso para los mal pensantes el último disco- y aclamado por la crítica- no era conocido por los comisarios.

Los museos no deben simplemente llenarse de cosas del pasado. Bowie ha significado un punto y aparte de la concepción de muchas cosas. Y ha paseado su música por el cabaret berlinés, la canción francesa, el teatro bretchiano, el mimo, los grandes musicales y el kabuki japonés. Ha sido vestido por los grandes de la moda, y su libertad de actitud ha ayudado al cambio de otras muchas.

Bowie es pasado, presente y futuro. Es un señor maduro y elegante y fue una loca a la búsqueda de su identidad. Muchas vidas, mucho arte y mucha filosofía “haz lo que debas y necesites a los veinte años, pero entérate que la edad te alcanzará y prepárate para ese momento” Él lo hizo.

Por siempre David, ahora en el Victoria and Albert, hasta agosto. Otro músico para mi santoral, y además con peana.